martes, 12 de octubre de 2021

Animales de Argentina en peligro de extinción.

La siguiente nota vamos hablar de algunas especies de animales en peligro de extinción en Argentina, algunos conocen cuales son y otros no, la idea es mostrarles algunos ejemplares que por diversas razones su ecosistema está desapareciendo y es muy importante que todos tomemos conciencia de lo perjudicial que esto genera a nuestro planeta. Según la Fundación de Vida Silvestre Argentina (FVSA) suman en la actualidad más de 500 especies amenazadas en nuestro país.

¿Cuáles son los animales en peligro de extinción?


HUEMUL


Se calcula que solo quedan aproximadamente 700 ejemplares de esta especie de ciervos robustos, con grandes orejas y astas en los machos. Este animal fue víctima de la caza furtiva, ataque de otros animales y enfermedades, además de los incendios forestales que redujeron muchísimo su hábitat natural y su población.

Los Huemul están dispersos en áreas aisladas y en diferentes bosques de la Patagonia andina y la Estepa Patagónica.



AGUARÁ GUAZÚ 


El avance del hombre sobre su ecosistema hizo que se redujera considerablemente el número de ejemplares de este zorro, el más grande de Sudamérica. Vive en las provincias de Formosa, Chaco, Santa Fe y Corrientes, al noreste del país, en zonas inundables. También se lo conoce como lobo de crin (su nombre científico de la especie es Chrysocyon brachyurus).



YAGUARETÉ


Es el felino más imponente, solamente le ganan el león y el tigre por su tamaño, la caza y depredación hizo que desapareciera de los Esteros del Iberá, en donde quieren llevarlo nuevamente para protegerlo.

En la actualidad se lo encuentra sólo en la selva misionera, cuando antes vivía en Jujuy, Chaco y Formosa.



BALLENA FRANCA AUSTRAL


Se la puede encontrar en la costa de Puerto Madryn todos los años desde septiembre hasta diciembre, durante el momento que viene para aparearse. Es el mamífero más grande de la Argentina.

Por la fuerte caza de su especie, su población se redujo un 90 por ciento, los científicos de la fauna marina creen que hoy solo quedan en el mundo 3000 ejemplares en todo el mundo, del cual el 20 por ciento habita en el Mar Argentino. Este animal mide 15 metros y pesa 47 toneladas.



TATÚ CARRETA


El Tatú Carreta es uno de los animales más antiguos de Sudamérica, esta especie vive en la Argentina en las zonas de bosques del chaco y la selva misionera, son solitarios y miden 1.30 cm pero con 50 metros de cola larga. Al ser un animal típico del territorio argentino, la sobrevivencia se ve muchas veces amenazada por la pérdida de su hábitat natural y su cacería. 

Una de las razones que este animal está desapareciendo es por que lo buscan por su carne exótica para poder venderlo  a los coleccionistas y utilizan su caparazón cómo caja de resonancia. En la actualidad está en una situación de “PELIGRO CRÍTICO”.



MONO CAPUCHINO O SAPAJUS APELLA


Este mono es conocido como capuchino de cabeza dura, mono silbador o mono caí, vive en sudamérica, se caracteriza por presentar en el cuerpo un pelaje que varía de castaño  claro a castaño oscuro o marrón rojizo, en las extremidades y cola presenta una coloración que varía de marrón oscuro a negro, siendo estas últimas las partes más oscuras del cuerpo. En la frente presenta pelaje erecto simulando unos cachos de allí su nombre, el rostro puede presentar pelaje corto que se esparce sobre la piel negra. Es una especie relativamente grande, la longitud entre cabeza y cuerpo está entre 35 y 49 cm, y posee una cola prensil de entre 38 y 49 cm, los machos pesan alrededor de 3,7 kg y las hembras 2,3 kg. Al igual que otros cebides habita en la selva húmeda tropical, se desplaza en árboles de gran altura y se caracteriza por presentar hábitos diurnos, ser activos e inquietos. En Argentina se los encuentran especialmente en Misiones, y se los puede ver en el Parque Nacional Iguazú. Aunque también sobreviven en Tucumán, Jujuy y Salta. Están amenazados por el tráfico y el comercio ilegal.



CIERVO DE LOS PANTANOS 


Es el cérvido más grande de Sudamérica y en Argentina se lo encuentra en los Esteros del Iberá, Corrientes, y en el Delta del Paraná (Buenos Aires y Entre Ríos), donde constituye un símbolo de la cultura isleña.

Los adultos llegan a pesar unos 150 kilogramos, pueden alcanzar unos 2 metros desde la cabeza a la cola y una altura de hasta 1,30 a nivel de la Cruz. Tienen pelaje pardo rojizo y negro en las patas, por otro lado los machos generan grandes astas y al pasar un año se les caen y vuelven a crecer. La destucción de su hábitat y la caza son las principales amenazas que enfrentan sus poblaciones, en nuestro país se considera como "especie en peligro de extinción".



TAPIR


El Tapir es el mayor herbívoro terrestre de Argentina, se trata de un mamífero adaptable con amplia distribución en Sudamérica y nativo del norte del país, es otra de las especies catalogadas en “peligro de extinción”.

Estos animales son de cuerpos robustos, que están pesando alrededor de 300 kilos, tienen patas y cola corta y una altura de un metro desde el lomo hasta el piso. Tienen ojos pequeños, orejas redondeadas y erguidas y su labio superior lo tiene prolongado en una probóscide o trompa muy flexible.

Tienen ojos pequeños, orejas redondeadas y erguidas y el labio superior prolongado en una probóscide o trompa muy flexible. Poseen un olfato y oído muy desarrollados y una vista algo débil. Su piel es muy resistente.

Se lo encuentra en bosques densos y zonas con pastos de América Central, América del Sur y Asia. Los que habitan América del sur y central son el tapir norteño o de Baird, también llamado "anteburro de centroamérica"; el tapir de montaña o andino, llamado "pinchaque de los Andes", y el tapir amazónico que vive en Venezuela y el norte argentino. En nuestro país, el área ocupada por el tapir bajó a la mitad en los últimos 130 años. En el presente sólo se lo ubica en Misiones, Formosa, Chaco, una estrecha franja del norte de Corrientes y las zonas selváticas de Salta y Jujuy. La otra especie, el tapir malayo, que puede pesar hasta una tonelada, se encuentra en las selvas de Vietnam y Laos y en la isla de Sumatra.



FLAMENCO ANDINO


Es una especie muy poco conocida y con un rango de distribución limitado. Posee unas largas piernas y las patas son de color amarillo, con respecto al cuerpo es igual al flamenco, solo que se destaca por sus ligeras variaciones en el color de su plumaje.

El cuello es largo y curvado, y cuenta con 3 dedos que apuntan hacia adelante en cada pata. La longitud del cuerpo de los adultos se sitúa entre los 102 y 110 centímetros; en ocasiones pueden crecer hasta los 140 centímetros. La medida entre ala y ala, llamada “envergadura”, es de 1 a 1.6 metros, y el peso es de 1.5 a 4.1 kilogramos

El rango geográfico del flamenco andino abarca una pequeña zona de altas mesetas de Sudamérica, que abarca los siguientes países: Bolivia, Argentina, Chile y Perú. En este último se encuentra solamente en la región sur, y en Argentina se localiza en el noroeste. Vive en hábitats a 2,300 y 4,500 metros sobre el nivel del mar en lagos salinos y alcalinos.



CHINCHILLA DE COLA LARGA.


Este roedor no está domesticado, por ende es un animal salvaje que también puede desaparecer, este roedor es oriundo de Chile y también se lo puede encontrar con los nombres de Chinchilla chilena o costera, el largo de su cuerpo es de 26 cm aproximadamente y su cola llega a 13 cm. La cola debe de estas especies de roedores tienen que ser largas, ya que les sirve de contrapeso y le permite alcanzar velocidades mayores cuando huyen de depredadores.

Sus orejas son de un gran tamaño a comparación de su pequeño cuerpo, estas pueden llegar a medir más de 4 cm, el peso de su cuerpo ronda entre los 600 y 800 gramos. Una de las características que toma mayor relevancia es que las hembras son más grandes que los machos. 

El pelaje es muy liso y suave, suele ser de color gris y blanco con algunas franjas negras y sus bigotes pueden medir aproximadamente 13 cm. Es una especie nocturna pero en épocas de mucho frío suelen salir durante el día. La chinchilla de cola larga es autóctona de Sudamérica, especialmente de la zona de los Andes y vive en las zonas más áridas y montañosas, entre los 400 y los 2.000 metros de altitud. La explotación del terreno es la principal amenaza para la conservación de la chinchilla de cola larga. Por otra parte, su depredador natural es el zorro, cuya especie es muy abundante y que también está reduciendo notablemente la presencia de las chinchillas.

El estado de conservación de la especie está en serio peligro, se considera en estado crítico y es posible que se extinga en los próximos años si no se la protege.