miércoles, 10 de enero de 2024

Mitología Egipcia


La mitología Egipcia abarca el estudio de creencias religiosas del antiguo Egipto desde la época predinástica hasta que se impuso el cristianismo en el momento que fueron prohibidas en tiempos de Justiniano I, en el 535 AC.
Estas prácticas duraron más de tres mil años que se fueron variando con el tiempo. La variada iconografía egipcia era muy diferente de la griega y la romana, en la mitología egipcia muchas deidades son representadas con cuerpo humano, y cabezas de otros animales.

“Al hablar de mitología nos estamos enmarcando en la religión del Antiguo Egipto que se expresa de una manera mitológica. Es decir, hay una serie de relatos acerca de la divinidad", explicó el investigador del CONICET Marcelo Campagno, Doctor en Historia por la Universidad de Buenos Aires

Campagno afirmó que “hay un mito central que articula una gran cantidad de historias y es el del rey, identificado con un dios particular, Horus, quien a su vez se articula con diversos dioses en una serie de relatos fundamentales para entender la religión y la política del Antiguo Egipto".



Historia

Las ideas religiosas de los antiguos egipcios tuvieron dos fases:

  • Durante la época predinástica, divinizaron aquellos fenómenos naturales que les desconcertaba, o infunden temor, de los que no conocían la razón de su proceder; asociaron estas divinidades con las características de ciertos animales, y los representaron con forma humana aunque conservando rasgos zoomorfos: el halcón en el dios Horus, "el elevado", dios del cielo; el perro egipcio, o chacal del desierto, "el guardián de las necrópolis", se convierte en un dios protector, Anubis; el cocodrilo del Nilo, un peligro constante, en un dios temido, venerado en la región de El Fayum, etc. Además les atribuyeron conceptos humanos, como la relación familiar, por lo que se formaron tríadas compuestas por un dios, su esposa y su hijo, y también pasiones humanas por lo que se les rendía culto dando ofrendas en los templos a cambio de favores solicitados, o recibidos.

  • A pesar de la agrupación de los pueblos egipcios en las "Dos Tierras": el Alto y Bajo Egipto, cada uno de los nomos (provincias) mantuvo sus deidades protectoras, lo que significaba la veneración a decenas de dioses, que adquirían mayor o menor relevancia según la importancia que tuviese cada ciudad: en Heliópolis se adoraba a Ra, en Tebas a Amón, en Menfis a Ptah y Hator, etc.

El mundo para ellos se dividía en tres regiones: 

  • El cielo “Nun” que es la morada de los dioses, cuya diosa es Nut que es representada como una mujer con el cuerpo arqueado cubriendo toda la tierra.
  • La tierra donde viven las personas, la casa de Geb (el Dios Creador) que es un hombre tumbado bajo nut.
  • Por último está el más allá o Duat, donde gobernó Osiris y luego Horus, en un espacio recorrido en su barca solar por Ra durante la noche, y por donde transitaban los espíritus de los difuntos sorteando los peligros

Vida después de la muerte

Una de las creencias que tenían era la inmortalidad de los dioses y faraones, ante esto los egipcios empezaron a practicar el embalsamamiento y la momificación para preservar la integridad del individuo en la vida futura.
Los antiguos egipcios creían que el espíritu de las personas estaba conformado por el BA, el KA y el AJ. Los egipcios pensaban que el espíritu de los difuntos era conducido por Anubis hacía el lugar del juicio en la “sala de las dos verdades” y el corazón del muerto que era la parte de la moralidad de la persona se pesaba en una balanza, contra una pluma que era la representación del Maat, el concepto de la verdad, armonía y orden universal. Si el resultado era positivo, el difunto es llevado ante Osiris en Aaru, sin embargo Ammit “el devorador de corazones” que era representado por una bestia que era mezcla de León, cocodrilo e hipopótamo, destruía aquellos corazones cuya sentencia resultaba negativa, impidiendo su inmortalidad

Fiesta de los antiguos Egipcios

Los egipcios fueron los primeros en hacer fiestas celebradas en honor a los dioses. Estás eran establecidas según las épocas maritales del año.
La llamada “la fiesta de las lamentaciones de Isis” estaba dada por el luto y las lágrimas hacia el solsticio de invierno se celebraba "la Busca de Osiris" y el 1 "tybi" o 2 de enero la "llegada de Isis" a Fenicia: pocos días después la fiesta de la "Reaparición de Osiris" unía los gritos de alegría de todo Egipto a la alegría pura de Osiris: la fiesta de las Simientes y de la sepultura de Osiris, pues la muerte de Osiris es un símbolo esencialmente agrícola; la de su "resurrección", cuando empiezan a brotar las plantas, la de la "preñez de Isis", del nacimiento de su hijo Harpócrates, a quien se ofrecían las primicias de la recolección, y la de las "Pamylias o de la procesión del phallus" (falo), unidas más o menos a las precedentes, caían en un gran periodo que abrazaba la mitad del año, desde el equinoccio de otoño hasta el de la primavera, (desde el 28 de noviembre al 21 de marzo), a principios del cual se celebraba la "Purificación de Isis”.